sábado, 28 de marzo de 2009

Como una Cobra

Me pregunto: ¿Cómo cojona funciona esto de escribir? Y no me refiero a coger un papel y un boli o darle a la tecla y poner unas palabras formando frases que tengan un sentido.
Me refiero a crear, inventar, a desarrollar en cuestón de minutos una historia, una divagación, un poema que hacía un momento ni si quiera lo había pensado.
Tengo claro que necesito un algo, que haga click en mi mente. Digo algo porque no se muy bien qué es. Unas veces sirve una palabra, otras un olor o un sonido, la música, una imagen, pueden ser cosas tan variadas que además de no servir para nada su clasificación, me resulta tremendamente perezoso hacerla.
Y el resultado, puede ser un sentimiento, un pensamiento, vivencias....sin embargo,¿son reales?
Porqué, si anteriormente no las había pensado? Se supone, son nuevas para mí, pero si no las conozco, cómo puedo escribir sobre ellas?
Ayer leyendo el post de Calpurnia sobre el peine del viento, me volvió a ocurrir. No tardé ni dos minutos en escribir un comentario de diez lineas. ¿Dónde tenía yo las palabras? Salieron sin pensarlas. Salen y salen como el agua en una fuente caudalosa.
Y ahora lo voy a probar de nuevo, sin preparar nada tomaré una palabra y escribiré. La palabra va a ser "divagar" la elijo porque ha salido y porque ando sin rumbo por mi mente continuamente. Veremos lo que ocurre.
Divago por mi mente y divago por la ciudad. Mis deportivas conducen mi cuerpo, porque mi pensamiento se niega a dirigir el paseo. Si bien el día no es soleado es perfecto para perderte como en un bosque. Árboles, ramas, hierba, aparecen con ellos, colores encantadores verdes, marrones, dorados... ¿encantadores de qué? de personas, de corazones de Seres. Porque SOY un YO que decide ESTAR en este bosque que a muchos se les antoja como todos los bosques pero que a mí...
A mi me ha encantado, lo mismo que un encantador de serpientes, y yo una cobra saliendo de la cesta contorneandome al son de la música. Música que abanza, toma terreno y cuando miro no está.
Sola, decido soltar lastre para que mi paseo sea más ligero. Descalza siento bajo mis pies la hierba calentita por los rayos de sol que se filtran entre las ramas. La siento mullida, cada vez más mullida y con más calor. Cambio el angulo de visión y la arena está bajo mis pies. Un sol radiante me acompaña en la orilla.
No era aquí donde pretendía llegar, pero claro como divagaba por mi mente y mi pensamiento se negó a mandar...No me pienso marchar, estoy a gusto tumbada escuchando el mar.
La música no desaparece, da igual el camino que lleve y donde esté no se como lo hace pero siempre me encuentro con ella.
PD.: Yo iba a contaros mi próxima salida de mini vacaciones pero antes de empezar me acordé de Calpurnia y........pues hoy no es viernes y no hay cervecitas, así que esto debe ser innato en mí como las ideas de Descartes Juazzzzz

5 comentarios:

  1. Suéltalo todo aquí... suéltalo...
    Que ya tengo preparado el rollo de precinto... jajajajajjaja

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  2. Intenta dejar la mente en blanco, eso si que es difícil y la explicacón a tu pregunta.

    Un saludo.

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  3. jajjaja si es que ese amigo tuyo llamado Descartes, tiene cada idea...jajjajaja ´mira que sabe jugártela.
    Besazos masajeadores

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  4. holaaaaaaaaaaa
    gracias por la mención de honor...pero oye.... no quiero torcerte tus planes "proyectados" para tu entrada bloguera, que a ver si me van a llover unos palos en la chepa ehhhhhh. Si todas las veces que yo divago, fuesen tan fructíferas en argumentos, como la tuyas...... madre mía...
    sabes una cosa....divaga todo lo que quieras y más porque es un gustazo leerte..... y si, la cabecita se va a las keler, sin remedio.... es que esto de la concentración, es muuuuy duro.

    besos besos besos

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  5. Chica, qué alegría escribir así..! :)

    Un besazo grandeee!!

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