viernes, 12 de marzo de 2010

Ya era hora

Querida amiga:

Gracias por tus lineas. Me alegra saber que todo te va bien. Por aquí todos continuamos con la rutina diaria que sólo se rompe cuando yo la lío, cosa que conociéndome no te extrañará. Sin ir más lejos, hace un par de días tuve una de esas jornadas que a falta de meter la pata una vez fueron unas cuantas las veces, te cuento.

Salí de casa como siempre con el tiempo justo para coger el bus, pero esta vez no lo perdí. Con libros y cuadernos en las manos heladas, porque hacía un frío de narices fui a sentarme. Casualidad estaba libre uno de los asientos que tienes que subir un pequeño escalón. Allí fui yo toda decidida, levanté el pie justo cuando el conductor arrancaba bruscamente. ¿Te lo imaginas, no? MH por el suelo y lo que llevaba en las manos de viaje por el pasillo del bus. Un chico que estaba sentado cerca, me vio, me mira y me dice: "uffff " ¿Uffff ? no, la ...... que me metí. Luego, ya en clase me encontraba incomoda. Llevaba un jersey de cuello vuelto muy cómodo y que había usado todo el invierno pero no sabía porqué me picaba en el cuello. Lo averigüé. Me lo había puesto al revés y tenía la etiqueta tocando las narices. Ya decía yo que se había deformado, jaja de eso nada que que las prisas no son buenas para vestirse. Como ves me mantengo en mi línea.

Por lo demás, te diré que he aprendido algo. Que ni sirve, ni debo protestar, mosquearme o pasarlo mal por como actúen los demás. Que no debo, ni puedo intentar que hagan las cosas de manera diferente. Que no es mi responsabilidad. Que ellos toman sus decisiones y que lo que en realidad debería hacer es dejarme de tonterías y empezar a cambiar mi manera de pensar; dejar de actuar de acuerdo a lo que creo que es correcto y pensar un poco en que es lo que más me interesa a mí. Esto supone dejar de ser yo, lo sé, pero es que tanta corrección me esta jodiendo la vida y me he dado cuenta de que estoy acumulando demasiadas ilusiones sin realizar, esperando a que sea el momento adecuado para que unos y otros no se molesten o no les afecte, esperando a poder y no pudiendo nunca. Me voy a plantear seriamente intentarlo, pero no tengo muy claro que saldrá de todo esto. Ya te iré poniendo al día que seguro estas ya impaciente por saber que va pasando.

Por hoy no tengo nada más que contarte, así que me despido esperando tu respuesta.

Muxuxxxxx.
MH

jueves, 4 de marzo de 2010

Evaluando la vida

Cuando habla se dirige a mí,
sus palabras me llegan,
penetran en mi mente
me hacen pensar.
Sus ojos atraviesan mi estructura
escudriñan mi interior,
me desnudan,
descubren secretos cuidadosamente guardados.
Comienza la trasformación
todo cambia lentamente
en la intemperie de la noche surge el día;
noche negra, noche oscura
no ves que ya te has de alejar.
Caminos abandonados, viejos empedrados
quedan atrás,
detrás de una vida se alejan
con lágrimas de polvo que no supieron regar
ni tu vida, ni la mía,
sólo las de los demás.
Caminos secos, olvidados
ahora el viento os azota
y polvo levanta para cubrir al viajero
que ya no transita tus suelos.
Sus botas rotas se alejaron,
no las culpes a ellas
fueron tus piedras que las rasgaron.
Ya se alejan, no regresan
por más que el viento cubra de polvo al viajero
no mira el pasado.
Los caminos abandonados, los viejos empedrados
quedan atrás,
tras una vida que se aleja descalza,
aunque no la quieras dejar marchar
el día descubre secretos,
ya nada es igual.