A toda prisa

Hace tanto tiempo que no escribo que ya no se ni cómo empezar. Pero a ver, es que me distraigo. Yo me despierto y muy formal organizo mi día, enciendo el ordenador para mientras desayuno, leer mis correos, escribir un post, echar un vistazo a la granjita (este tema da para otro post) y bueno, ver a la niña de mis ojos. Y ahí es cuando me pierdo, porque en el momento que le veo y hablo con ella, ya no leo los correos, no miro la granja, no escribo y lo peor es que no desayuno hasta que miro la hora así, como por casualidad y veo que es tan tarde que no llego justa, sino que no llego jeje. Me tomo el desayuno a toda velocidad no sin mandar algún que otro beso, me ducho igual que un rayo, me visto y salgo con todo en la mano después de estar despidiéndome diez minutos, porque total ya de llegar tarde pues me despido en condiciones jeje.

Y esto es por la mañana, pero por la noche pues parecido porque nos liamos a hablar y me dan las tantas y claro luego a la mañana me cuesta levantarme.

Pero soy feliz y me gusta andar a toda prisa a cambio de un beso suyo.