No sé cómo hacerlo, no sé cómo agradecer todo lo que me da, todo lo que a pesar de las dificultades recibo de ella.
Porque siempre está ahí aunque se muera de sueño esperando a que yo abra un ojo, para darme un beso, aunque yo vuelva a caer profundamente dormida al segundo.
Porque no decae cuando yo no veo más que sombras a mi alrededor y sabe como encender la luz.
Porque me cuenta emocionada todos los detalles que le gustan en mí.
Porque adora mis defectos.
Porque me hace sentir bien.
Porque sabe hacerme sentir una princesa, la reina de su mundo.
Porque cuando dice "aja" está enfadada y yo nunca sé porqué y me mira a los ojos aún sabiendo que en el mismo instante en que lo haga se le olvidará el enfado.
Porque cuando me pongo cabezona y no puedo seguir, tira de mí hasta que comienzo de nuevo a andar.
Porque no me entero cuando dice y no le importa repetir.
Porque me sonríe cuando lloro y mis lágrimas desaparecen.
Porque sólo con verme un instante sabe si algo va mal.
Porque pelea para que despierte y me levante mientras ve como me vuelvo a dormir.
Porque sabe que llegaré tarde.
Porque cuando le digo "tardaré una hora en volver" espera pacientemente tres.
Porque mis silencios son palabras para ella.
Porque es mi sonrisa y mi estrella.
Porque la amo.